Generalmente las mejores ofertas para la compra de una vivienda se reciben entre los 30 primeros días de su puesta a venta. Si ponemos un precio de venta muy elevado ayudaremos a otros vendedores a vender su casa demostrando que es una buena oportunidad.
Hay que tener en cuenta que los compradores no suelen acudir a ver una vivienda si el precio no está dentro de sus posibilidades. Así que aunque pensemos en negociar y bajar el precio, sin visitas no podremos hacerlo. Por ello remarcamos de nuevo la importancia de poner un precio justo desde el comienzo de la venta.
De cualquier forma, aunque existiese una oferta para tu vivienda con un precio elevado, el banco si tiene información sobre el mercado y puede decidir no facilitarle el préstamo al comprador, por lo que se tendría que bajar el precio.